El síndrome metabólico, llamado también síndrome de resistencia a la insulina o síndrome "X", se define como la asociación de factores de riesgo relacionados con la imposibilidad de la insulina de mantener la glucemia (glucosa en sangre) dentro de los valores considerados como normales.
Su prevalencia es aproximadamente de 19.3 % en la población general (según la OMS ) afectando al 42% de las mujeres y al 64% de los hombres. Su importancia radica en que es un fuerte predictor de Diabetes y enfermedad cardiovascular, siendo esta última la principal causa de muerte en el el mundo.
Esta determinado genéticamente y condicionado por factores ambientales. La obesidad, principal factor, es un trastorno prevalente que se define con un índice de masa corporal (IMC) mayor de 30 kg / m2, Siendo el IMC la relación entre peso y altura. Su valor normal oscila entre 20 - 25 Kg / m2.
Sin embargo es requisito indispensable valorar la obesidad abdominal (Perímetro de cintura) ya que se considera mejor índice de riesgo vascular.
El diagnóstico se establece cuando están presentes 3 o más de los siguientes criterios:
-Circunferencia abdominal: Mayor o igual a 102 cm en el hombre y mayor o igual
a 88 cm en la mujer.
-Presión arterial: Mayor o igual a 130-85 mmhg.
-Glucemia en ayunas: Mayor o igual a 100 mg / dl.
-Triglicéridos (lípidos en sangre) mayor a 150 mg/dl
-Colesterol (HDL) menor de 40 mg / dl en el hombre y menor de 50 rng / dl en las mujeres.
Es esencial para prevenir y revertir el Síndrome metabólico tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
-Reducción del peso corporal entre un 7% y 10% en el primer año, luego continuar la reducción de peso hasta alcanzar un IMC menor de 25 Kg / m2.
Esto se logra fundamentalmente con dieta hipocalórica ( 500 a 1000 calorías diarias) y ejercicio.
- Evitar el sedentarismo, realizando ejercicio físico moderado a intenso durante
un mínimo de 30 minutos por 5dias a la semana. Se recomienda actividad aeróbica, trote liviano o marcha rápida.
-Iniciar o aumentar el estilo de vida, suprimir el alcohol y el tabaco. Aumentar el consumo de frutas y verduras.
-Agregar fármacos, antihipertensivos, hipolipemiantes y hipoglucemiantes cuando sea necesario.
-Existe consenso general en que el Síndrome Metabólico debe ser tratado enérgicamente en forma preventiva y no esperar a la aparición de Diabetes y enfermedad cardiovascular. La mejoría de los hábitos de vida tiende a normalizar todos los factores riesgos, retrasando de esta manera la aparición de complicaciones irreversibles que llevan a un aumento en la morbilidad y mortalidad general.